Ya estamos en mayo. Con la llegada del buen tiempo, y con los días más largos, nuestras fincas se llenan de familias deseosas de disfrutar durante la celebración de bodas y comuniones, entre otros muchos eventos. Los Jardines del Canal, o los de Torre del Pino son el marco perfecto para pasar una jornada perfecta entre hermosos y refrescantes jardines, con espacio para que los niños disfruten a lo grande, y por supuesto, con una gastronomía de altura que demuestra que la cocina es un auténtico arte.

Nuestros cocineros se esfuerzan, día tras día, para ofrecer un auténtico festival de sesanciones, con texturas, aromas y sabores que sorprenden y agradan a partes iguales. Mediante nuestras recetas, en José Fernández buscamos provocar un efecto emocional en nuestros invitados. Buscamos el deleite, el disfrute en buena compañía mientras se maridan nuestros platos con una buena copa de vino. Buscamos lograr momentos llenos de felicidad que podáis recordar durante toda la vida.

Porque para nosotros, lo más importante es veros disfrutar con nuestras recetas, convirtiendo el acto de comer en un arte que transciende así mismo al deleitar al paladar y poner en marcha nuestra creatividad para servir platos deliciosos, y atractivos también a los sentidos. A fin de cuentas, comer es poner en marcha todos nuestros sentidos si queremos apreciar realmente la comida.

La comida nos entra por los ojos, y nos atrapa incluso antes de comerla gracias al aroma que nos llega desde el plato. El placer que saboreamos al degustar las recetas es inigualable con nada en este mundo, y por supuesto, no podíamos dejarnos el tacto cuando partimos el pan con las manos, o el oído, al degustar un dulce mientras partimos el chocolate y suena crujiente antes de llegar a nuestra boca. Sin duda, la gastronomía es todo un arte que nos estimula y nos deleita sin excepción, ¿verdad?

Fotografías: Doblestudio