Chaqué, smoking, frac, traje… Cuando se asiste a una ceremonia, siempre surge la eterna pregunta del que me pongo. Hoy, para tratar de aclarar estas dudas, queremos hablaros del chaqué. Un vestuario que debe limitarse únicamente a ceremonia de día, y sobre todo si la boda es por la mañana o a primera hora de la tarde, ya que no es un traje apropiado para la noche según las reglas de protocolo más básicas.

Si el novio usa chaqué, al menos el padrino deberá usarlo. Pero jamás deberás llevar chaqué si el novio no lo lleva, ya que además de saltarte el protocolo, los invitados podrían confundirte con el contrayente. Una vez dicho ésto, ¿qué piezas componen el chaqué? En total, son tres las piezas que deberás llevas si finalmente optas por usar este vestuario: la levita o chaqueta, el chaleco, y el pantalón.

La primera de estas prendas, la chaqueta o levita, es de un corte muy similar al de la americana, pero deberá llevar un único botón a la altura del ombligo, mientras que el corte que divide los dos faldones traseros es su característica más reseñable. Respecto a los colores, el negro y el gris son los colores más habituales, aunque cada vez es más habitual ver chaquetas en otros colores.

El chaleco puede ser de varios colores, recto o cruzado, y aunque el número de botones suele ser tres, este número puede variar. Lo que sí que es fundamental es que el color del chaleco combine con la corbata, ya sean ambos del mismo color, o porque chaleco y corbata compartan la misma gama cromática o combinen perfectamente.

Respecto al pantalón debe tener un corte clásico en gris o en negro, y con un fino listado de rayas verticales. Los tirantes son indispensables, ya que los pantalones ni siquieran tienen trabillas para llevar cinturón.

Además de estas tres prendas básicas que componen el chaqué, deberás también tener cuidado al elegir la camisa. Lo más normal es que sea en color blanco, con cuello italiano y puño doble, para poder ponerle gemelos. Para acabar, recuerda hacerte con unos tirantes, un pañuelo para el bolsillo, y con unos zapatos lisos de cordón y en color negro.

Fotografías: Pinterest y La Cocina de José Fernández