Nos encanta la primavera. No solamente porque los jardines comienzan a florecer y nuestras fincas lucen espléndidas para celebrar bodas y eventos, sino porque da muchísimo gusto ir al mercado a realizar la compra y poder encontrar productos frescos y de temporada con los que cocinar. Si os gusta la cocina, y además disfrutáis haciendo la compra, sabréis de lo que estamos hablando. Los ingredientes son el emento básico con el que elaborar nuestras recetas. Y con una buena mano en la cocina, ingredientes de calidad y una pizca de cariño, el resultado de cualquier plato puede ser espectacular.
De ahí la importancia que tiene cocinar con ingredientes de primera calidad, y a poder ser, de temporada. Y el mes de abril que acabamos de comenzar es un mes fantástico en el que la huerta, y la naturaleza en general, nos ofrecen auténticas joyas con las que meterse a la cocina para preparar comidas, cenas, cócteles y cualquier sarao que se presente. Alimentos que además de ser frescos, tienen un sabor potente y especial.
En el campo de las frutas, los reyes de la mesa sin duda son la fresa y el fresón, que entran por los ojos antes de convertirse en una explosión de sabor en nuestra boda. Pero en el mercado también podrás encontrar naranjas llenas de sabor, mandarinas, limones, plátanos y pomelos, y las cerezas en sus variedades más tempranas a finales del mes de abril.
De la huerta también nos llegan delicias como la alcachofa, la berenjena, la cabalaza, los pimientos, los calabacines, los espárragos verdes, los pepinos, la remolacha, la acelga, el ajo, el puerro o las cebolla, entre otras muchas verduras que estarán presentes en nuestras mesas en las próximas semanas.
Y de productos de la mar, para disfrute y alegría de los foodies más exigentes, podemos destacar por ejemplo la presencia de ostras (nuestras ostras a la crema están deliciosas), centollo, caballa, anchoas o el rape (los medallones de rape en salsa verde causan sensación entre nuestros invitados). Seguro con este post te hemos abierto el apetito, ¿verdad?
Fotografías: Doblestudio